Es importante que sepas que no sólo hay un tipo de hambre. Puedes localizar en tu cuerpo 7 tipos y quiero que los identifiques en ti para aprender a hacer caso principalmente y únicamente sólo a uno de ellos… EL HAMBRE REAL
Seguro que te ha pasado alguna vez la siguiente escena, acabas de cenar en un restaurante, has comido muy a gusto y te has sentido llena/o, pero aún así llega el camarero y pregunta ¿comerás postre? Te dice las distintas opciones que hay y te auto convences de que aún te queda algo de sitio para ese brownie que tiene tan buena pinta. Al final te arrepientes de haber dicho que sí, te sientes muy lleno/a e incluso te encuentras pesada/o y con unos remordimientos tremendos. Seguramente después te habrás preguntado por qué lo has hecho, si realmente ya no tenías hambre.
Cuáles son los tipos de hambre?
¿Conoces a Jan Chozen Bays? Es una monja Zen, pediatra y autora del libro «Comer Atentos», donde ella considera que el fenómeno de tener hambre es un proceso bastante más complejo de lo que parece y en el que intervienen distintos tipos de hambre. Jan Chozen tiene identificados 7 tipos de hambre. De todos los tipos de hambre, la de estómago, se puede decir que es la que identificamos como hambre REAL, sin embargo hay otros tipos de hambre que influyen en ese complejo proceso que es tener hambre.
Veamos qué tipos de hambre podemos identificar:
El hambre visual
Este hambre es en el que te ves cautivado por la vista. Ver un plato que consideras apetitoso y hace que te apetezca comerlo o ponerte más cantidad.
El hambre táctil
Es la que te impulsa a comer por la necesidad que tienes de tener ese alimento en tus manos. Es ese hambre que te hace desear coger una patata frita cuando las ves en la mesa o coger una fruta entre tus manos para llevarla a la boca. Es ese hambre que ante un pastel de nata, te impulsa a coger con el dedo un poco de nata. Esa experiencia de comer directamente con las manos, experiencia que hace totalmente diferente probar una aceituna llevándola a la boca con un tenedor que entre tus dedos.
El hambre olfativa
Es aquella que te lleva a entrar en una panadería porque has olido el pan recién hecho y quieres comer un trozo o la que al entrar en una cafetería y oler el café recién hecho hace que te apetezca tomarte uno bien calentito.
El hambre bucales
Aquél que te acerca a comer porque necesitas experimentar un sabor y experimentar placer en nuestra boca. Es la que nos lleva a comer alimentos «dulces o salados». Este hambre selectiva suele llevar detrás un desencadenante emocional.
El hambre auditiva
Es un tipo de hambre que te impulsa a comer por el sonido del alimento, el crujir del pan recién hecho o las papas. Este tipo de hambre se sacia con el sonido que se produce al masticar los alimentos. De hecho, si tomamos una patata fina y no está crujiente no saciaremos este tipo de hambre
El hambre estomacal
Es el hambre que notas en el estómago. Se sacia fundamentalmente por el volumen y la notas como un vacío en el estómago. Este tipo de hambre se puede confundir con las sensaciones de miedo o ansiedad que se manifiestan en tu estómago como resultado de la contracción de la musculatura lisa cuando se estimula el sistema adrenérgico. Las personas suelen decir que se les ha hecho como un «nudo en el estómago» y esta sensación puede ser muy similar al estómago vacío.
El hambre corporal o celular
Es el que sientes cuando las células de tu cuerpo tienen algún déficit de algún nutriente. Por ejemplo carne, cuando tenemos anemia, o zumo de naranja cuando necesitamos vitamina C para hacer frente a una infección. Este tipo de hambre es muy sutil o difícil de observar, y es algo que está muy presente en los niños.
El hambre mental
Viene precedido por toda la información que vas acumulando sobre aquello que debes o no debes comer. Este tipo de hambre suele hablarnos de alimentos buenos o alimentos malos.
Un ejemplo claro de hambre mental es cuando decidimos que vamos a dejar de tomar (gluten, azúcar, grasas …) porque hemos leído que no es bueno para la salud.
El hambre emocional o de corazón
Es un hambre que está ligado a las emociones. El hambre emocional es un tipo de hambre que te está incitando a comer para reconfortarnos.
El hambre social
Es un tipo de hambre que se presenta cuando estas relacionándote con los demás en un entorno social y con comida. Así hay veces que aun teniendo todas tus hambres saciadas puedes verte «obligado/a» a comer porque deseas agradar a los demás. Otras veces en que dejas de comer algo que te apetecía comer porque en el entorno que estás no se considera adecuado o te da vergüenza. Este tipo de hambre es una mezcla de todas las anteriores y está muy ligada tanto al hambre mental, como al hambre del corazón. Este tipo de hambre se manifiesta porque comer es un acto social y de interrelación con los demás.
¿Cómo distinguir entre hambre real y hambre emocional?
En general, existe una tendencia a decir que hay que hacer caso solamente al hambre estomacal, considerándola como el «hambre REAL», y es cierto de alguna manera pero en realidad todas las hambres están presentes, en muchos momentos son contradictorias y contrapuestas y tener el resto de hambres no significa que siempre sean inadecuadas.
Lo que yo quiero que reconozcas el tipo de hambre que tienes en cada momento y así decidir conscientemente y con libertad qué es lo más adecuado para ti en ese momento, por eso te aconsejo la lectura de nuestro post sobre ¿Cómo distinguir entre hambre real y el hambre emocional?
2 comentarios
Gracias por este artículo tan interesante. Durante la pandemia comencé un grupo de pérdida de peso en zoom ( Gorditas Anónimas) y gracias a eso mis amigas y yo no subimos de peso y más bien logramos perder. Cada semana preparo un PPT y esta semana utilice el artículo públicado por Uds. y fue un éxito. Muchas gracias por compartir.
Enhorabuena por haberte puesto en acción y por haber encontrado un grupo en el que encuentres el apoyo y el ánimo que necesitabas. Un abrazo y a seguir trabajando en ti misma