Ansiedad y angustia son dos términos psicológicos que se usan indistintamente cuando una persona habla de su malestar. Ambas generan un estado emocional desagradable: tensión, inquietud… pero ¡no son lo mismo!
Es importante tener claras sus diferencias para no confundirlos y conocer realmente su funcionamiento en el individuo para saber cómo abordar el problema emocional que genera, poniendo en marcha así soluciones más eficaces. Cuando acabes de leer este artículo aprenderás a detectar si lo que sientes es angustia o ansiedad. Como he explicado, es fundamental saber distinguir entre ansiedad y angustia porque esta diferencia determinará la intervención psicológica.
¿Qué es ansiedad?
La ansiedad es una activación fisiológica, natural y adaptativa. Necesaria para la supervivencia ¿Qué quiere decir esto? Sentir ansiedad es positivo, por ejemplo, ante un examen o ante una situación que pone en riesgo la integridad física, como un coche que se salta un semáforo y puede atropellarnos. El Sistema Nervioso se pone en alerta y activa nuestro cuerpo para “salvarnos” del peligro (en un examen, nos mantiene activos para afrontarlo, en la carretera nos prepara para salir corriendo y reaccionar rápido).
Y ahora… te preguntarás… ¿Pero la ansiedad no es un trastorno? ¿y el trastorno de ansiedad generalizada? ¿o las fobias específicas como la fobia social o fobia a los perros? La ansiedad como he comentado es natural y positiva ¡pero! se convierte en un problema emocional cuando su intensidad y continuidad son demasiado elevadas. Recuerda, el grado de peligrosidad de la situación debe ser proporcional al grado de ansiedad que siento. Si cuando paseas te cruzas con un perro, tu nivel de ansiedad debe ser igual a la probabilidad de que ese perro te muerda, que será ¿1%? Es decir, no hay ansiedad… Si por el contrario tu ansiedad se activa de forma intensa, hablamos de ansiedad patológica, que precisa de terapia psicológica.
En resumen, la ansiedad es un mecanismo natural de supervivencia que nos acompaña en nuestro día a día y es necesaria y positiva, que se expresa con una activación fisiológica (aumento de la frecuencia cardiaca, tensión muscular…). Solo supone un problema cuando es patológica y entonces genera un malestar emocional en la persona.
¿Qué es la angustia?
El sentimiento de angustia, aunque tiene una relación directa con la ansiedad, se produce de manera diferente y no es un mecanismo natural del ser humano. Es una respuesta fisiológica a los síntomas de la ansiedad, esta se produce cuando la persona hace una interpretación negativa sobre la ansiedad. Cuando la ansiedad se activa aparecen pensamientos e ideas relacionados con que la situación vivida es insoportable, creando así una expectativa muy negativa y un sentimiento de “condena” que se manifiesta con sintomatología muy desagradable, estado constante de malestar y bloqueo, que no te permite actuar ante la situación y que puede conducir a un estado depresivo. De manera que, podríamos decir que la angustia es un amplificador de los síntomas de la ansiedad que se produce a causa de la interpretación (pensamientos) que hace la persona de lo que siente (de la activación fisiológica de la ansiedad).
Diferencias entre la angustia y la ansiedad
La ansiedad genera un estado de sobreactivación, movimiento y se relaciona con trastorno de ansiedad generalizada, fobias específicas… y la angustia genera un estado de paralización y bloqueo que conduce más a un estado de ánimo depresivo guiado por la aparición de tristeza y frustración.
Los síntomas de ansiedad se manifiestan con nerviosismo, presión en el pecho, activación corporal, tensión, inquietud motora, etc. Y los síntomas de la angustia se manifiestan con dolor o “nudo” estomacal, sensación de ahogo o “nudo” en la garganta, inmovilización, sensación de mareo, etc.
“La ansiedad moviliza, la angustia paraliza”
Aunque estos conceptos estén interrelacionados, y resulta difícil hacer una diferenciación precisa, lo que quiero que entiendas es de dónde nace y cómo funciona cada uno de ellos. Eso nos ayudará a buscar soluciones adecuadas.
¿Cuál es el tratamiento indicado para la ansiedad y para la angustia?
Tanto para la ansiedad, como para la angustia y en general, para prácticamente todos los problemas emocionales el tratamiento de referencia es psicológico y/o farmacológico. Específicamente el tratamiento psicológico basado en terapia cognitivo-conductual, el cual ha demostrado ser el más eficaz y rápido.
En nuestro centro trabajamos la ansiedad y la angustia desde el enfoque cognitivo-conductual a través de sesiones y tratamientos individualizados, terapeuta-paciente. Aunque la base y el funcionamiento del problema es la misma, cada persona tiene unas experiencias vividas y habilidades de afrontamiento diferentes y por ello es muy importante adaptar la terapia a cada caso para que sea más eficaz.
Sabemos que tomar la decisión de buscar ayuda es el paso más difícil, pero esta decisión marcará un antes y un después en tu vida, y será el principio para sentirte mejor.
Cómo saber si tengo Ansiedad?
Guía Manejo de la ansiedad
A continuación os presento nuestra guía para aprender a conocer y manejar la ansiedad. Podéis encontrar la guía pinchando aquí.
En ella os explicamos detenidamente qué es la ansiedad, qué tratamientos encuentras para mitigarla y cómo podemos manejarla y controlarla.
Espero qué os sea de utilidad y aprendáis un poco más sobre uno de los trastornos más habituales en nuestra sociedad, el cuál, padecen millones de personas en nuestro país.
Recordar que podéis seguirme en las redes sociales donde encontraréis mucha más información de interés.
Hasta el próximo día!!
2 comentarios
Hola tengo una consulta… En todos los casos de Ansiedad es necesario el tomar fármacos?
Buenas tardes Maira, para nada. La ansiedad en muchos casos puede trabajarse unicamente desde la parte psiológica sin necesidad de fármacos. Un abrazo